Aunque no lo parezca, hay vida más allá de la bofetada que le ha propinado Will Smith a Chris Rock. Nadie habla de otra cosa estos días cuando hay algunos detalles de la gala que son bastante llamativos. Es el caso de las cestas de regalo que se han llevado los nominados y que algunos piensan que son incluso mejor que hacerse con una de esas estatuillas del tío Óscar.
Más de 100.000€ en regalos
Sí, habéis leído bien, los que han sido nominados a los premios Óscar de este año 2022, como nuestros queridos Javier Bardem y Penélope Cruz, se han llevado a casa una bolsa con multitud de regalos en su interior. Y no se trata de uno de esos packs repletos de muestras de cremas para el acné o dentífricos, sino que en ellas había mucha más sustancia y dinero de lo que ningún mortal podremos ver jamás en nuestras vidas.
Prueba de ello es que lo más valioso de lo que se les ha entregado a los nominados a los Óscars es, nada más y nada menos, que una estancia en un recinto privado de esos que salen en las películas de época. Se trata del Castillo de Turin, que no se encuentra en Italia sino en Escocia y cuya estancia está valorada en 45.000 dólares. Ahí ya tenemos una buena parte del valor de esas bolsas… pero es que hay mucho más dentro de ellas. Mirad.
Ha sido una firma de marketing la que le ha organizado a los premios Óscar el contenido de estos packs. Y es que para sorprender a las celebridades nominadas hace falta mucho dinero y objetos exclusivos. Dentro de esta bolsa, además, los afortunados podían encontrar una invitación para dos personas para acudir a un Spa valorada en más de 13.000€. Pero hay más cosas, como galletas, brownies o velas exlcusivísimas que lejos de imaginar que la Academia de Hollywood ha desembolsado miles de dólares por regalarlas, se trata de una aportación de las propias firmas colaboradoras que incluso pagan por formar parte de estos packs.
¿Cuánto pagan las empresas?
Ese precio que pagan las empresas por incluir sus productos que acaban en las manos de todos los nominados en la gala cuestan una media de entre 4.000 y 5.000 dólares cada uno. Es obvio que el interés por estar presentes se debe a que el retorno de la inversión está asegurado y se trata de un negocio muy lucrativo con celebridades que tienen cuentas bancarias con cifras que superan los seis y siete ceros. De todas formas, aunque esos 45.000 euros de la estancia en el castillo, o los 100.000 del total de cada bolsa os parezcan exagerados, en otras ediciones de la gala de los Óscars se superaron esas cantidades, con cifras que alcanzaron los 200.000 dólares.
Ahora lo que hay que ver es si los propios nominados disfrutan de estos regalos y si las estancias en el castillo, las galletas, los brownies y demás agasajos son disfrutados por amigos, familiares o conocidos. Y es que según desvelan algunas fuentes, este tipo de regalos tienen repercusiones tributarias, por lo que muchas celebridades no quieren siquiera oír hablar de ellos. ¿Tú qué harías?