La fecha de estreno de Wandavision seguimos sin conocerla pero bien que nos enteramos de otros muchos (muchísimos) detalles sobre esta esperadísima serie de Disney+. Lo último tiene que ver con su estilo de grabación y nos ha llamado cuanto menos la atención. ¿Por qué? Pues porque se grabó con público y además muy al estilo de los años 50. Te lo contamos todo.
Wandavision, muy al estilo de las sitcoms de los 90
Con el año tan complicado que está teniendo Disney a nivel de estrenos en cine y TV, podemos decir que La Bruja Escarlata y Visión -recuerda que es así como se llamará en España- será casi como un bálsamo en este 2020. Sí, es cierto que la segunda temporada de la famosa The Mandalorian ya ha llegado y está siendo un éxito, pero el universo de Marvel, perteneciente a Disney, está huérfano de nuevo material por culpa de los múltiples retrasos del COVID-19 y esto, en última instancia, afecta a la compañía del ratón.
Lo que seguimos sin saber exactamente es cuándo veremos la serie en la plataforma de contenidos. Supuestamente llegará al catálogo en diciembre, pero hasta ahora no hemos tenido ninguna señal clara por parte de la firma. Muchos temen que la compañía haya decidido cambiar los planes a última hora y finalmente Wandavision sea retrasada a 2021.
Otros, sin embargo, mantienen la esperanza de que dentro de pocos días se haga oficial la fecha y podamos acabar el año, tal y como se planeaba, con la serie en pantalla. Sea como sea, una cosa sí tenemos clara: cuando se estrene, nos ofrecerá un formato bastante especial y una propuesta bastante inesperada e inusual a lo que probablemente muchos esperan.
Una serie de Disney+ muy especial
Por los pequeños adelantos que hemos tenido de La Bruja Escarlata y Visión, podemos inferir que esta no es una serie de corte «tradicional». Tenemos imágenes en blanco y negro y una puesta en escena muy de sitcom estadounidense que dará luego paso a otras secuencias a color en un planteamiento cuando menos disparatado.
Ahora hemos sabido además que durante la grabación se tomaron ciertas medidas cuanto menos curiosas. Para empezar, los capítulos fueron grabados con público como las series «de antes». Los asistentes al rodaje tuvieron que firma un contrato de confidencialidad bastante estricto, por lo que cuentan, razón por la que hasta ahora no se ha sabido nada (hasta que Entertainment Weekly, lo ha publicado en exclusiva a través de una entrevista a sus protagonistas, Elizabeth Olsen y Paul Bettany).
Tanto Olsen como Bettany reconocen que esto fue todo un reto para ellos, especialmente para el actor, que lleva años sin pisar un escenario con público en directo.
No es la única curiosidad que sabemos sobre el rodaje. Resulta que también hemos descubierto que para el mismo se utilizaron lentes e iluminación de los años 50 y que incluso el equipo de rodaje iba vestido con ropa de la época. Todo para recrear una ambientación mucho más especial para una serie que sin duda no pasará desapercibida para nadie.
Dinos, ¿tú también tienes tantas ganas como nosotros de verla?