Los tiempos en los que el Gagnam Style nos taladró y fue el vídeo más visto de la historia quedan bastante lejos. Ahora ya no está ni entre los 10 primeros con sus más de 4.000 millones de visualizaciones, y es que hay un rey indiscutible que, una vez más, ha batido otro récord astronómico.
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Baby Shark, más de 10.000 millones de visualizaciones y subiendo
No podía ser otro, es la canción más difícil de sacar de la cabeza una vez que se hace el hueco como el parásito mental que es. La canción de Baby Shark, y el maldito baile que la acompaña, se publicó un nefasto 18 de junio de 2016 y, desde entonces, no ha hecho más que subir como un cohete y reventar todos los récords de visionado.
Recientemente, ha cumplido otro hito en su objetivo de volvernos a todos locos y ha superado los 10.000 millones de visualizaciones.
10.000 millones, que en el planeta no hay todavía ni 8.000 millones de personas, para que te hagas una idea de la magnitud.
Está claro que la mayor parte de las visualizaciones vienen motivadas por padres que no saben cómo entretener a sus demonios, de modo que los hipnotizan en bucle con el baile horrible y la canción espantosa. Y de paso, molestan a muchos de los que viajan en el mismo tren o tratan de tomarse algo tranquilamente en la mesa de al lado.
Pero sea como sea, no tiene pinta de que vaya a frenar y está llamado a superar todas las marcas posibles.
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La canción Baby Shark destronó en su día a otra que más o menos merece los mismos adjetivos, aquel Despacito de Luis Fonsi que nos machacó los oídos en el lejano 2017.
Y pensábamos que eso era lo peor que le podía pasar al mundo, qué inocentes éramos entonces.
Con unos 7.700 millones de visualizaciones, es que Despacito ni tose a Baby Shark.
El siguiente puesto en el podio tampoco es que dé mucha esperanza para la humanidad, con el Johny Johny Yes Papa de los LooLoo Kids y sus raquíticos 6.000 millones y pico de visualizaciones. Es que a este paso, Baby Shark no tardará en doblar a la medalla de bronce, con cifras que explotan la cabeza.<zz
El engendro de canción infantil fue creado por Pinkfong, una empresa coreana de entretenimiento infantil y, probablemente, también la tapadera de algún supervillano.
No dudo que el objetivo final es que un día salgamos todos con un rifle y apretemos el gatillo con la canción sonando de fondo.
Hasta que llegue ese ansiado día, Baby Shark sigue, y sigue, y sigue…
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