Con la chapa que nos han dado este último año con estos dos conceptos, es posible que ya te hayas dado cuenta que «metaverso» no es solo ponerse unas gafas de realidad virtual y que los NFTs no implican únicamente imágenes fotos de golems a WillyRex. El metaverso y los NFTs son dos tecnologías que están avanzando muy de la mano. ¿Pueden aportarnos algo positivo o van a servir únicamente para especular y tener que pagar hasta por respirar aire virtual? Expliquemos un poco la relación que se está gestando entre los NFTs y el metaverso.
Metaverso y NFTs en videojuegos
Son varios los caminos a explotar de los NFTs dentro del metaverso.
Llega el play-to-earn
Los juegos NFT existen desde hace tiempo y sí, te pagan por jugar. Axie Infinity es uno de los referentes en este sector, que viene a ser una especie de juego de Pokémon, con criaturas un poco extrañas. Para jugar hace falta un equipo de tres monstruos que tendremos que comprar con su propio token —y que no es barato—. Luego, el jugador puede ir ganando tokens conforme va ganando partidas, ganando dinero en el proceso.
La idea es que el metaverso explote aún más este sistema, aunque tiene ya muchos detractores en la actualidad. Los juegos NFT no son realmente divertidos —había que decirlo y se dijo—, y, por otro lado, el dinero que se gana en plataformas como Axie Infinity proviene de los nuevos jugadores. Vamos, que hoy por hoy, estos juegos son un esquema Ponzi de manual. El tiempo el público decidirá si esto cambia en el metaverso o si desaparecerá como otras tan prometedoras tecnologías que cayeron en el olvido.
Revolucionando el pay-to-win
Otra función que los NFT pueden aportar al metaverso es la posibilidad de pagar o poner en alquiler algunos de nuestros assets virtuales para hacer más fáciles nuestras partidas o monetizar los logros que hayamos conseguido. Sobre el papel puede no sonar mal, pero si esta idea acaba siendo desarrollada tiburones de los negocios como EA o Ubisoft… cuidado. Las loot-boxes parecerán el regalo del Happy Meal en comparación con la bomba de relojería que puede ser esto.
Aplicaciones para Arte, derechos de autor y cobro de royalties
Estamos en la prehistoria del metaverso. Hace un par de décadas, seguro que veías como imposible vivir de Internet. Hoy, muchos vivimos de ello. La revolución que se inició con las ‘punto com’ podría tener un nuevo episodio en el metaverso. Lo estamos viendo poco a poco con el arte NFT, pero no sería extraño que modelos de negocio que conocemos de sobra como la música, el pago de regalías para usar una imagen de un banco de stock o cualquier otro asset que utilizamos para crear experimente una nueva revolución. O por lo menos, no habría que descartar que todo lo que se vaya a utilizar en el metaverso requiera hacer un previo pago en el metaverso y esté todo controlado vía token. Puede parecer apocalíptico, pero sería el fin de la piratería, por poner un ejemplo.
DeFi y nuevas formas de inversión en el metaverso
Las finanzas descentralizadas llegaron hace unos años para quedarse. En nombre de las DeFi se ha hecho de todo, desde plataformas brillantes hasta estafas de lo más cutre. Dejando a un lado esto, las DeFi demostraron que no hace falta un ente regulador para organizar un exchange. Las operaciones en estas plataformas se hacen de cartera a cartera. Vamos, que la Hacienda de tu país no puede hacer nada para meter la mano, por mucho que lo intente. En un mundo en el que cada vez nos funden más y más a impuestos, la economía sumergida puede evolucionar hacia una economía paralela, descentralizada y virtual dentro del metaverso. Los NFT solo vendrían a poner su granito de arena al mundo del staking y las ganancias pasivas. Que funcione, sea legal o sea ético, ya es otra cosa.
Pero el DeFi va mucho más allá de la especulación o esquivar a los estados. Lo que conocemos hoy día sobre el DeFi podría ser únicamente la punta de un enorme iceberg. Una economía totalmente paralela, independiente y totalmente descentralizada que podría tener un mayor peso en la sociedad que el que tiene ahora mismo.