La artista estadounidense Taylor Swift ha desbancado la marca que mantenía Adele para el álbum más vendido en una sola semana en Estados Unidos. La publicación especializada Billboard ha confirmado que su nuevo trabajo, The Life of a Showgirl, se coloca en lo más alto del registro semanal.
Según los datos preliminares de la firma de medición Luminate, el álbum de Swift suma 3,5 millones de unidades desde su lanzamiento en Estados Unidos, superando el hito de 25, de Adele, que en 2015 marcó 3,378 millones. Un récord que estaba a punto de cumplir una década y que ahora cae ante el impulso del nuevo proyecto de la cantante.
Cómo se alcanzó la marca histórica
Las cifras de Luminate detallan que, del total reportado, aproximadamente 3,2 millones corresponden a ventas puras (formatos físico y digital) y en torno a 300.000 unidades derivan del consumo en streaming equivalente. Es la métrica estándar con la que se computan los debuts en el mercado estadounidense.
La nueva marca se alcanzó incluso antes de cerrar el periodo completo: la superación del registro llegó a los cinco días de salida, con el recuento semanal todavía en curso. Estas cifras se consideran provisionales hasta el cierre oficial del corte de semana que realiza Luminate.
Además del total semanal, el lanzamiento dejó otros hitos: en su primer día The Life of a Showgirl registró 2,7 millones de copias, y estableció un máximo histórico en vinilo con 1,2 millones de unidades vendidas en siete días, un listón notable para el formato físico.
Conviene distinguir entre métricas: aunque Swift lidera en unidades equivalentes en su debut semanal, el récord de ventas puras (sin streaming) sigue en manos de Adele con 25. Ese matiz no resta impacto al logro: sitúa a Swift en la cima del consumo agregado en la primera semana de un álbum en EE.UU.
En lo musical, la cantante aparca la introspección de su anterior trabajo y regresa a un pop más luminoso, con la vuelta a los mandos de los productores Max Martin y Shellback. Este giro estilístico conecta con etapas previas de su trayectoria y, sumado a una estrategia comercial minuciosa, ha impulsado el rendimiento inicial.
El despliegue incluyó una película de acompañamiento concebida como celebración del lanzamiento, en la que la artista desgrana las claves del proyecto. El filme recaudó 15,8 millones de dólares en su primer día y acumula 46 millones a nivel mundial, según datos difundidos por Billboard.
Reacción y contexto
En entrevistas recientes, Swift ha defendido el enfoque del álbum y ha asumido con naturalidad el debate público: considera que cualquier conversación en torno al lanzamiento ayuda a que la música llegue a más oídos, y subraya que las reacciones forman parte del propio juego artístico.
El estreno llegó arropado por múltiples ediciones con portadas y contenidos especiales, así como por una base de fans extraordinariamente activa. Antes de salir al mercado ya se contabilizaban millones de preguardados en plataformas, una señal del apetito previo que ha contribuido al empuje en la primera semana.
En el canal físico, las versiones especiales en vinilo tuvieron una respuesta fulminante en tiendas y en la web oficial, reforzando la tendencia de la artista a dominar tanto el entorno digital como los formatos de colección.
El rendimiento de The Life of a Showgirl también mejora los mejores registros previos de la propia cantante: su anterior techo en unidades equivalentes de debut semanal se situaba en 2,61 millones con The Tortured Poets Department. El nuevo lanzamiento empuja ese listón por encima de los 3,5 millones.
Con datos sólidos de Billboard y Luminate, el nuevo álbum de Swift establece el mejor arranque semanal de la era moderna en EE.UU., desplaza la marca que fijó Adele con 25 y añade récords paralelos en formatos y taquilla; una combinación de volumen inicial, estrategia y narrativa musical que la mantiene en primera línea de la industria.
