Sí, amigos, lo bueno no dura para siempre, y esto es justo lo que ha pasado con Wordle. El juego de palabras que hace furor entre los tuiteros y todos los poseedores de un B1 de inglés tiene finalmente comprador. Se trata nada más y nada menos que del New York Times, uno de los grandes periódicos de Estados Unidos. La página de las tiras cómicas y los acertijos se ha modernizado y tiene un nuevo delantero centro.
Tras decenas de pretendientes, Wordle ya tiene nuevo dueño
Josh Wardle, el creador de Wordle, no se imaginaba la expectación que provocaría su minijuego cuando lo lanzó en octubre de 2021. Y es que lo desarrolló para su esposa, amante de los juegos de palabras. Lo que iba a ser un proyecto personal dedicado a una sola persona acabó teniendo repercusión mundial y una factura por los servidores que no queremos ni imaginar. Tomad apuntes los que no sois románticos, que estáis perdiendo oportunidades de negocio.
Wordle se ha mantenido desde entonces sin anuncios y rechazando ofertas de compra a diestro y siniestro. Es por esto por lo que nos ha sorprendido la noticia de su compra. El NYT ha pagado la friolera cantidad de un millón de dólares por la licencia del juego. Su creador, Josh Wardle —que es muy original poniéndole nombre a las cosas, por cierto—, ha anunciado que el juego seguirá siendo gratuito, aunque el NYT aclara que será solo «inicialmente».
¿Qué hago yo ahora sin mi Wordle?
Por suerte, el mecanismo de juego es tan sencillo que es fácil de clonar (como bien ilustran las decenas de copias en distintos idiomas que han surgido). A fin de cuentas, se trata de una lista de 2.135 palabras de cinco letras. Los más mañosos han calculado que, a una partida diaria, da para jugar mientras te tomas el café durante 7 años. Siempre y cuando te descargues el código, claro. Te daremos unas pistas de cómo hacerlo un poco más adelante.
¿Por qué el New York Times ha comprado Wordle?
El New York Times es una de las pocas publicaciones mundiales que ha sabido mantener su posición en la transición a las publicaciones digitales. Para incentivar las suscripciones, el NYT ofrece a sus lectores un compendio de juegos en línea. Algunos son gratuitos, pero otros, como el crucigrama, solo se pueden acceder si eres usuario de pago. Sus sudokus, spelling bees y demás minijuegos atraen a millones de personas cada día. Wordle se unirá a su lista de juegos gratuitos, y el creador original, John Wardle, promete trabajar con el NYT para traspasar el historial de aciertos original a la nueva plataforma.
¿Cómo me descargo el Wordle?
Podemos hacer lo que hicieron los molestos bots de Twitter que hacían spoiler de la palabra del día: descargarnos el código fuente. Primero, debes descargar la página de Wordle en formato HTML dentro de su propia carpeta. Luego nos descargaremos el manifest.json de la web, siguiendo este enlace: https://www.powerlanguage.co.uk/wordle/manifest.json
Para finalizar el puzzle, bajaremos también el archivo Javascript que hace de motor del juego, llamado main.e65ce0a5.js. Con esto, podrás jugar offline durante unos cuantos años. No obstante, lo más seguro es que no puedas guardar el historial de las estadísticas de acierto como en el juego online.