En los últimos días, Cáritas ha detectado una oleada de intentos de estafa a nivel nacional a través de la red social Facebook. Los responsables de estos fraudes utilizan de manera ilícita tanto el nombre como la imagen de la institución para solicitar, de forma engañosa, datos personales de los ciudadanos a cambio de una supuesta ayuda económica que en realidad no existe.
El modus operandi es siempre similar: se publican anuncios en Facebook en los que se promete recibir hasta 300 euros con el respaldo de Cáritas Española. Estos anuncios, además de difundirse en la propia plataforma, están circulando por otras vías como WhatsApp. Los usuarios que acceden al enlace proporcionados son redirigidos a una página web falsa, donde se les solicita rellenar varios datos personales bajo la falsa promesa de obtener el dinero. Incluso se anima a quienes reciben el mensaje a compartirlo, extendiendo así el alcance del fraude y facilitando la posible captación de más víctimas.
Anuncios fraudulentos y difusión por mensajería
Estos anuncios muestran imágenes y mensajes completamente falsos que imitan la comunicación oficial de Cáritas. Dragando por Facebook y WhatsApp, circulan titulares como «Recibe hasta 300 euros con el apoyo de Cáritas Española» o «¿Estás pasando por un momento difícil? Cáritas puede ayudarte con hasta 300 euros». La organización pide a la población que extreme las precauciones y no dé por buenas este tipo de solicitudes.
El contenido, lejos de proceder de Cáritas, utiliza trucos de ingeniería social para captar la confianza de las personas más vulnerables. Una vez el usuario entra en la web fraudulenta, se le pide información importante, como nombre, DNI, número de teléfono y otros datos sensibles, lo que expone gravemente su privacidad y supone un elevado riesgo de robo de identidad.
Medidas tomadas y recomendaciones
Ante la gravedad de los hechos, Cáritas ha presentado la correspondiente denuncia ante la Policía Nacional y ha solicitado a Facebook la retirada inmediata de los anuncios fraudulentos. Además, la organización está valorando tomar acciones legales adicionales para frenar esta captación de datos ilícita y evitar que se repitan situaciones similares en el futuro.
La confederación recalca en sus comunicaciones la importancia de consultar siempre los canales oficiales de Cáritas para obtener o solicitar ayuda: las páginas web de las Cáritas Diocesanas, la web oficial de Cáritas Española y sus perfiles verificados en redes sociales. También, es crucial no compartir) los mensajes sospechosos vinculados a estas falsas ayudas económicas en ningún canal (redes sociales, WhatsApp, Telegram, etc.).
La importancia de verificar la información y protegerse
Desde la organización recuerdan que ninguna petición de ayuda legítima será gestionada fuera de sus canales habituales, ni solicitarán nunca información sensible a través de anuncios o webs no verificadas. Por ello, es fundamental actuar con cautela y utilizar siempre los medios oficiales para solicitar o recibir asistencia, evitando caer en engaños. Agradecen la colaboración de quienes han alertado sobre el fraude y hacen un llamamiento a la prudencia a la hora de compartir datos personales en internet.
Fuentes de Cáritas advierten también sobre elementos manipuladores en los mensajes fraudulentos, como el uso incorrecto de denominaciones oficiales, o la falsa insinuación de que la ayuda solo se dirige a nacionales. Además, es importante estar alerta ya que, aunque hasta ahora el objetivo ha sido la captación de datos, no se descarta que los estafadores puedan solicitar dinero directamente. La organización continúa investigando y monitoreando estas prácticas para proteger tanto a los usuarios como su reputación.
La proliferación de este tipo de fraudes en Facebook evidencia la necesidad de que los ciudadanos permanezcan atentos y recurran siempre a fuentes oficiales y seguras antes de facilitar datos personales en internet, especialmente cuando se trata de supuestas ayudas económicas con un trasfondo social.
Estos episodios de captación fraudulenta muestran lo sencillo que resulta, hoy por hoy, suplantar la identidad de organizaciones reconocidas y aprovecharse de la confianza social. La mejor defensa sigue siendo la información y la prudencia: si se tiene alguna duda, es recomendable consultar los canales oficiales antes de actuar o reenviar mensajes, para evitar alimentar estas cadenas de engaños.