Aston Martin refuerza su apuesta por los deportivos de alto nivel con el lanzamiento del Vantage S, una edición que busca equilibrar la tradición de la marca con la innovación técnica y un carácter aún más prestacional. Este modelo se sitúa como la versión más enfocada y emocionante de la familia Vantage, dirigida a quienes buscan una experiencia de conducción más intensa sin renunciar al refinamiento británico que caracteriza a la firma de Gaydon.
La denominación Vantage S es sinónimo de rendimiento superior desde hace décadas en la casa británica. Ahora, en pleno 2026, vuelve aún más afinada, recogiendo el legado de versiones S míticas e incorporando tecnologías de última generación tanto en el apartado mecánico como en el chasis y el diseño.
Motor V8 biturbo: potencia y respuesta
Bajo el extenso capó se esconde un motor V8 biturbo de 4.0 litros, heredado y mejorado a partir de las colaboraciones con AMG, capaz de entregar unos 671 caballos de fuerza y 800 Nm de par. Esta configuración supone un incremento de 15 CV respecto al Vantage convencional, logrando una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 3,3 segundos y una velocidad máxima registrada en 325 km/h, cifras que sitúan al Vantage S en la élite de los deportivos de lujo.
La transmisión recae en una caja automática de 8 velocidades, optimizada para una respuesta aún más directa y precisa. El conjunto transmite la potencia exclusivamente al eje trasero, manteniendo la pureza de la tracción trasera y una conducción muy conectada al asfalto.
Ingeniería de chasis y aerodinámica avanzada
Uno de los grandes avances en esta edición S se encuentra en el trabajo realizado sobre el chasis y la suspensión. La marca ha instalado unos amortiguadores adaptativos Bilstein DTX, recalibrado la geometría (cámber, caster y toe) y reforzado la estructura con nuevos bujes y soportes, lo que se traduce en una dirección más precisa y estable, especialmente en conducción deportiva y paso por curva.
En el plano aerodinámico destaca un alerón trasero ampliado capaz de generar hasta 44 kg extra de carga aerodinámica y un kit específico de detalles en el capó y la carrocería que mejoran el flujo del aire sin romper la estética elegante del modelo. Las llantas de 21 pulgadas, con neumáticos Michelin Pilot Sport S5 en medidas específicas, y los sutiles acentos en rojo aportan deportividad sin estridencias.
Diseño exterior e interior: elegancia y deportividad
Por fuera, el Vantage S mantiene la esencia del modelo conocido, pero añade elementos exclusivos como los detalles en el capó para mejorar la refrigeración, el característico difusor trasero y un discreto spoiler sobre el maletero. Los logos ‘S’ y las llantas forjadas con pinzas de freno en bronce enfatizan la diferenciación respecto a la versión convencional.
El interior es una combinación artesanal de Alcántara, cuero y fibra de carbono, con opciones de personalización que van desde los pespuntes en rojo o plata, hasta los asientos deportivos con la “S” bordada en los reposacabezas. Como era de esperar, la tecnología no falta: instrumentación digital, infoentretenimiento conectado y una atmósfera que mezcla tradición y modernidad.
Ficha técnica clave y equipamiento destacado
- Medidas: Largo 4,49 m, ancho 2,04 m, alto 1,27 m, batalla 2,70 m
- Peso: 1.605 kg (aprox.)
- Motor: V8 biturbo 4.0 litros
- Potencia máxima: 671 CV
- Par motor: 800 Nm
- Aceleración 0-100 km/h: 3,3 s
- Velocidad máxima: 325 km/h
- Consumo medio: 12,1 l/100 km
- Maletero: Entre 235 y 346 litros
- Neumáticos: Michelin Pilot Sport S5 21” (opción de invierno Pilot Alpin 5 AML)
- Frenos carbocerámicos disponibles como extra
- Etiqueta DGT: C
- Precio estimado desde: 300.000 euros
Las mejoras respecto al Vantage estándar
Las mejoras del Vantage S no son solo numéricas. El pedal del acelerador presenta una calibración específica más directa, la suspensión adaptativa ha sido puesta a punto para ofrecer un tacto más firme y comunicativo y la dirección se muestra aún más precisa gracias a los ajustes realizados en la geometría del tren delantero. Esto se traduce en una mayor conexión del conductor con el vehículo y una respuesta más natural y deportiva en cualquier modo de conducción.
A nivel técnico, se incluyen también novedades como un Launch Control actualizado que mejora marginalmente los registros de aceleración y nuevas opciones de frenado y asientos que permiten configurar el coche de forma más personalizada, desde frenos cerámicos hasta asientos con estructura de carbono ventilados.
