Los rumores relacionados con el Galaxy S10 siguen apareciendo por las redes, y si ya teníamos información sobre la pantalla agujereada que montará el próximo buque insignia de Samsung, hoy nos enteramos que nos será uno, sino dos agujeros los que tendrá la pantalla para dar cobijo a dos cámaras frontales. Eso es lo que podemos ver en las imágenes compartidas por Ben Geskin y Universelce, donde se muestran unos renders del supuesto terminal y un cristal protector que habría sido diseñado para encajar en el frontal del futuro dispositivo.
Doble cámara frontal para el Samsung Galaxy S10+
La imagen de los renders nos sirve para descubrir que la versión de mayores pulgadas del Galaxy S10, es decir, el Galaxy S10+, contará con un módulo de doble cámara frontal, ya que es el único modelo que cuenta con doble orificio en la parte superior de la pantalla. Desconocemos si esta doble cámara servirá para hacer fotografías con un mejor efecto de desenfoque o si además permitirá obtener tomas en gran angular gracias a una segunda lente, pero lo que sí parece confirmar es que sólo el Galaxy S10+ contará con este hardware.
Viendo las imágenes, parece que el modelo más pequeño, el Galaxy S10, sólo ofrecerá un único orificio en la pantalla, por lo que la función especial estaría únicamente destinada a su hermano mayor. Las imágenes han servido además para hacernos una idea de los biseles que mantendrá el terminal, algo que mejora en el borde superior gracias a la integración de la cámara en la pantalla, pero que parece mantener dimensiones en el bisel inferior.
Convencidos de que el notch no es la solución
Todo apunta a que Samsung va a seguir demostrando con el nuevo Galaxy S10 que el uso de un notch no es la solución más adecuada para ofrecer un diseño futurista con pantalla infinita. Todavía quedará por ver qué tal se sienten esas dos cámaras ocupando superficie de pantalla, así que hasta que no tengamos una unidad en nuestras manos no vamos a poder sacar conclusiones.
De primeras, parece que la solución es poco intrusiva y podría pasar desapercibida en cuestión de días, aunque seguro que habrá usuarios a los que no les guste y pongan el grito en el cielo contra Samsung. Otros fabricantes también están experimentando con soluciones similares, así que si no te gusta, mucho nos tememos que el 2019 va a ser el año de las pantallas agujereadas.