El martes Honor presentó en Londres su nueva gran apuesta dentro del mundo de la telefonía móvil. No fue sin embargo una rueda de prensa cualquiera: el evento se celebró en mitad del gran conflicto tecnológico entre EEUU y China y que tiene a su compañía madre, Huawei, pendiente de un hilo. Se desconoce aún cuándo veremos el teléfono en los escaparates, pero no por ello deja de merecer una mirada más de cerca. Acompáñanos.
Honor 20 Pro, un teléfono maduro a precio competitivo
La evolución de Honor desde que llegó a nuestro mercado ha sido impecable. La firma, prima hermana de Huawei, comenzó poco a poco, con una especial atención puesta en su difusión online y con el público joven como principal foco de ataque. La idea era ofrecer un teléfono de diseño y rendimiento óptimos a un precio asequible sin dejarse ver nunca, eso sí, como la versión barata de su empresa madre.
Años más tarde, la esencia continúa siendo la misma. Honor cuenta con un catálogo interesante y muy pudiente dentro de la gama media, con precios muy competitivos y con una identidad propia que han hecho que hoy en día sus lanzamientos generen bastante expectación.
Lástima que esta vez toda esta atención se haya visto desviada. El conflicto Trump-Huawei explotó el pasado domingo, ensombreciendo un evento que ya no se podía cancelar y que la firma optó por celebrar con aparente normalidad. Una calma tensa se palpaba en el ambiente, y así lo transmitía Javier Palacios, country manager de la firma, en unas declaraciones a la prensa española en las que pedía calma y confianza, con una metáfora que ha transcendido ya en todos los medios -y que ya te citamos hace unos días: lo que hoy es una tormenta, mañana es una lluvia y pasado un chaparrón.
Eché de menos que ese mismo mensaje de tranquilidad fuera también transmitido en el escenario por George Zhao, presidente de Honor, quien prefirió tomar la postura del aquí no ha pasado nada y mantener el guión establecido.
Quizás la intención de Zhao no era otra que la de no manchar un evento que ya de por sí tenía colgado el Sambenito, intentando no ensombrecer a un Honor 20/Honor 20 Pro, que llegaba sin duda en el peor momento posible.
Y es que el smartphone poco se lo merece. El Honor 20 Pro es una propuesta interesante, que se mantienen muy en la línea de lo conocido y visto por la marca. El diseño es muy continuista, apostando por el todo pantalla con agujero en la misma para la cámara frontal, aunque es cierto que hubiera preferido unos marcos aún más finos -la competencia ha puesto el listón muy alto, lo siento, Honor-, para tener mayor sensación de amplitud si cabe y aportar algo nuevo al diseño.
El frontal recuerda así bastante al del Honor View 20 -un teléfono que a mi personalmente me encanta-, incluso en la distribución desigual de los márgenes -el marco inferior es algo más grueso que el superior. Al darle la vuelta la cosa cambia bastante respecto al citado teléfono presentado en marzo. Ahora tenemos un despliegue de cuatro cámaras, que prometen ofrecer una experiencia propia de los teléfonos premium. La interfaz de la cámara no alberga muchas sorpresas, todo fluye bastante bien (el salto entre modos y lentes es rápido) y el enfoque también goza de buena soltura.
Las condiciones de la zona de demostración no sin ni mucho menos las adecuadas para poder probar correctamente el desempeño del sistema fotográfico, pero al menos lo que hemos visto en esta primera toma de contacto me gusta: el modo macro arroja un buen detalle, el gran angular es aceptable y el modo retrato parece tener, al menos de primeras, algo más que el aprobado.
En la mano se siente cómodo (es algo más ligero que el View 20, si seguimos con las comparaciones) y su acabado holográfico es bastante resultón -aunque sin quitar el sueño. El lector de huellas en el lateral está a buena altura para los dedos, pero se siente una solución antigua, echándose de menos la apuesta por un sensor integrado en pantalla.
A nivel de interfaz, nada nuevo bajo el sol: Honor repite entorno (mientras puede, ejem) con Magic UI, donde todo parece moverse sin problemas y responder a los gestos con rapidez. Que te guste o no, como viene siendo habitual en estos casos, es una cuestión de gustos personales.
Ahora solo queda saber cuándo podremos dar caza a este teléfono en las tiendas. Lejos del estilo de la firma, que suele dar fecha y comercializar sus nuevos productos en pocos días, esta vez solo tenemos unos precios (muy justos para lo que hemos probado) y la promesa de que podría llegar a primeros de junio, pero sin nada seguro sobre la mesa.
Honor prefiere así ser cauta y esperar a ver cómo se desarrolla el enfrentamiento en las próximas semanas para gestionar así de la mejor manera posible la distribución de un teléfono que, inmerecidamente, se ha visto ensombrecido por toda esta historia. Veremos cómo acaba la cosa. Qué mala suerte has tenido, Honor 20.
[Fotos realizadas por José Morales]