El Galaxy S10 ya está entre nosotros y es probable que te surja una gran duda: ¿cuánto ha cambiado respecto al Galaxy S9? Si crees que se parecen demasiado, ahora vamos a sacarte definitivamente de dudas, eso sí, dejando a un lado las especificaciones técnicas de siempre y centrándonos en lo importante: lo que en realidad vas a experimentar cuando lo tengas en la mano. Vamos allá.
Mejoras del Galaxy S10 frente al Galaxy S9
Su pantalla es notablemente superior
La pantalla edge-to-edge del nuevo Galaxy S10 es un panel Dynamic AMOLED que ofrece mejores detalles y definición que el Galaxy S9. Apreciarás imágenes más precisas, disfrutando además de compatibilidad con HDR10+. Samsung asegura además que ha reducido la emisión del color azul -ese pequeño mal de las pantallas AMOLED-, al tiempo que ha logrado que el panel en sí consuma menos batería.
El propio tamaño de la pantalla también ha crecido: los Galaxy S9 y S9+ medían 5,8 y 6,2 pulgadas, respectivamente, mientras que los Galaxy S10 y S10+ suben hasta las 6,1 y 6,4 pulgadas.
El Galaxy S10 es además ligeramente más ligero y también un pelín más delgado, por lo que debería ser dos aspectos que notarás en la mano si vienes de un S9.
Viene con lector de huellas integrado en pantalla
Era un salto necesario y obligado en esta nueva generación y por tanto más que bienvenido. El Galaxy S10 cambia el lector de huellas, que en el Galaxy S9 estaba en la espalda, para pasarlo al frontal del smartphone, integrándolo en la propia pantalla. Samsung hace uso así de un sensor ultrasónico que asegura ofrecer mayor precisión que nunca y ser por tanto más difícil de engañar.
La batería ha aumentado notablemente
No solo tenemos un módulo de batería que ahora es superior (estamos hablando de 3.500 mAh del Galaxy S10 frente a los 3.000 mAh del Galaxy S9), sino que también contamos con ayudas extras que también ayudarán a alargar la autonomía, como es un procesador más eficiente y moderno, una inteligencia articial mejorada y una pantalla (antes mencionada) que consume menos.
En el caso del Galaxy S10+ también hay un alto importante (posee un módulo de 4.100 mAh) frente a los 3.500 mAh del Galaxy S9+ por lo que deberíamos experimentar un salto hacia adelante similar.
Las cámaras nos ofrecen ahora más posibilidades
Si tenías la sensación de que, con el Galaxy S9, Samsung se había quedado un poco estancada a nivel fotográfico, es posible que tu percepción cambie con el nuevo Galaxy S10. El teléfono se hace con nada menos que tres sensores de forma que disfrutarás de las «dos cámaras de siempre», una gran angular de 12 MP con apertura variable y otra telefoto de 12 MP también, a la que se suma ahora un tercero en discordia, un ultra gran angular de 16 megapíxeles, para capturar mucho más de la escena a fotografiar gracias a sus 123 grados.
https://youtu.be/ZCfgkIyD9g0
Al conjunto tendrás que sumar además la presencia de una NPU (unidad de procesamiento neural) encargada de reconocer y procesar de forma más precisa las escenas para ofrecerte así un mejor rendimiento cuando estés haciendo fotos.
La cámara selfie, por su parte, da el salto hasta el mismísimo 4K, subiendo además la resolución a 10 MP e incluso doblando la apuesta en el S10+ con dos sensores (el segundo de 8 MP).
Visto lo visto, ¿te parece lo suficientemente atractivo el Galaxy S10 para darle una oportunidad? ¿qué opinas de esta nueva generación?