Llevamos años viendo a gente de todo el globo hacer auténticas barbaridades con ordenadores Raspberry Pi. Lo habitual es hacerse con una de estas placas para fabricarte tu propia consola, un pequeño media centre para el salón, o incluso para hacerte un pequeño NAS. Pero siempre con sus limitaciones, claro. Pues bien, el youtuber Jeff Geerling se ha hecho con un rack típico de servidor y ha probado a montarse un NAS profesional utilizando una Raspberry Pi.
¿Puede una Raspberry Pi gestionar todo un servidor?
Si alguna vez has conectado un disco duro a una Raspberry Pi para hacer un pequeño NAS doméstico, sabrás que por mucho que puedas fabricarte un NAS con una de estas placas, el rendimiento no suele ser ninguna maravilla. De hecho, cualquier NAS básico con una o dos bahías para disco duro nos dará una experiencia mucho más interesante.
Pero esa idea preconcebida no ha conseguido parar los pies a Jeff Geerling, que se ha propuesto mover un servidor con una sola Raspberry Pi. Para ello, primero compró un rack con capacidad de 1.2 Petabyte. Dicho rack tenía, como no podía ser de otra forma, con una placa base con un Intel Xeon. El almacenamiento sería posible gracias a un equipo de 60 discos Seagate de 20 terabytes cada uno.
David contra Goliat. La Raspberry Pi contra el Xeon Gold
La locura no había hecho más que empezar. ¿Puede una Raspberry Pi Compute Module 4 con cuatro núcleos y una línea PCIe 2.0 hacer frente a un Intel Xeon Gold 6230R de 26 cores y 48 líneas PCIe 3.0? Es obvio que no, pero Geerling tenía que intentarlo. De hecho, el procesador no es el único cuello de botella posible en este setup. La Raspberry Pi puede mover 10 veces menos datos a través de su tarjeta de red. Y la placa base original cuenta con 32 veces más capacidad de memoria RAM que la Raspberry Pi Compute Module 4, por no hablar ya de la velocidad y las latencias.
Un experimento que ya sabíamos cómo iba a salir
¿Resultados? Bueno, como experimento, no está mal, pero a la hora de llevar esto a la práctica, el servidor hace aguas por todos lados. No sabemos si Geerling se lo ha pasado bien montando su equipo, pero tiene pinta de que el proceso ha sido bastante frustrante. Configurado en RAID 0, la Raspberry detecta el enorme volumen de 1.2 PB, pero nadie en su sano juicio guardaría información importante en un sistema tan vulnerable como un RAID 0. Intentando gestionar una configuración RAID diferente, Geerling se encontró todo tipo de problemas. De ahí que hasta el propio youtuber acabe reconociendo que la Raspberry Pi no está diseñada para un proyecto tan grande. Por tanto, es un éxito a medias. Se puede crear un NAS enorme gestionado por una simple Raspberry Pi, pero el rendimiento no será ni mucho menos espectacular.
La moraleja de todo este vídeo es que si quieres un NAS, cómpralo y no te compliques tanto la vida. Existen multitud de opciones de marcas reconocidas como Synology, Qnap o Asustor que permiten casi a cualquier usuario sin experiencia montar un pequeño servidor doméstico. Eso sí, no será tan divertido como montar un sistema con 60 discos y un rack de servidor.