Nvidia ha anunciado la reanudación de ventas de su chip de inteligencia artificial H20 en el mercado chino tras un periodo de restricciones impuestas por Estados Unidos. Esta decisión, que llega después de intensas negociaciones y movimientos diplomáticos, supone un paso relevante tanto para la compañÃa estadounidense como para la industria tecnológica global. El restablecimiento de relaciones comerciales en el sector de semiconductores refleja cómo la tecnologÃa y la polÃtica continúan ligadas y condicionan el crecimiento de los gigantes del sector.
El CEO de Nvidia, Jensen Huang, ha estado especialmente involucrado en el proceso, manteniendo reuniones tanto con autoridades estadounidenses como con representantes chinos. El resultado: el gobierno de EE UU ha garantizado la concesión de licencias para exportar el modelo H20 a China. Según ha confirmado la empresa, las entregas se iniciarán «pronto», lo que ha generado una inmediata reacción en los mercados y grandes expectativas entre los principales actores tecnológicos en Asia.
Guerra tecnológica y contexto comercial

En los últimos meses, la guerra tecnológica entre Washington y PekÃn ha situado a Nvidia en el centro de una batalla por la supremacÃa en inteligencia artificial. La prohibición inicial de venta de los chips H20, aplicada a mediados de abril tras el endurecimiento de sanciones por motivos de seguridad nacional, afectó de pleno al negocio de la empresa en China. Las restricciones provocaron rebajas millonarias en la contabilidad de Nvidia y una bajada inmediata en su cotización bursátil.
El H20 es un chip IA especialmente desarrollado para el mercado chino, creado bajo la arquitectura Hopper. Representa una solución ajustada a las limitaciones regulatorias estadounidenses, ya que los chips más avanzados de Nvidia (como los H100) siguen sin permitirse en territorio chino. A pesar de su menor capacidad, el H20 mantiene una elevada demanda, con clientes como Tencent, Alibaba o ByteDance interesados en su adquisición para alimentar modelos avanzados de IA generativa.
China, por su parte, llegó a reaccionar a las sanciones limitando las exportaciones de tierras raras, materiales esenciales para la fabricación de componentes de semiconductores. El desbloqueo comercial reciente forma parte de un acuerdo global más amplio, en el que EE UU flexibiliza controles tecnológicos y China retira trabas al suministro de estos materiales estratégicos.
Impacto en el mercado y la competencia tecnológica
El mercado chino es clave para Nvidia, aportando en torno a un 13% de sus ingresos globales y posicionándose como uno de sus principales clientes, solo por detrás de EE UU y Taiwán. La empresa ha destacado que la prohibición temporal le supuso renunciar a unos 15.000 millones de dólares en ventas, además de registrar una depreciación de inventarios por valor de 5.500 millones de dólares.
Al mismo tiempo, la presión de la competencia local en China, liderada por empresas como Huawei y DeepSeek, se ha intensificado. Estas firmas han aprovechado las restricciones para acelerar el desarrollo de soluciones propias, fomentando un ecosistema tecnológico local. La presencia de Nvidia sigue siendo fundamental, pero ha pasado de controlar el 95% del mercado chino a cerca de la mitad, según datos recientes compartidos por la dirección de la compañÃa.
El levantamiento parcial de las sanciones coincide con el lanzamiento de nuevos productos de Nvidia diseñados para el mercado chino y las restricciones regulatorias. Entre ellos destaca la GPU RTX Pro, pensada para aplicaciones industriales como fábricas inteligentes y logÃstica avanzada.
La reapertura de ventas también ha disparado la competencia: otras empresas estadounidenses como AMD esperan obtener permisos similares para exportar sus chips de IA, como el MI308, a China.
Relaciones diplomáticas y movimientos estratégicos

Durante los últimos meses, Nvidia ha desplegado una intensa agenda polÃtica y diplomática. Jensen Huang ha mantenido reuniones al máximo nivel tanto en Washington como en PekÃn. En EE UU, se ha entrevistado con el expresidente Donald Trump y legisladores para defender el papel estratégico de la inteligencia artificial estadounidense y la necesidad de mantener el liderazgo en la materia. En China, su agenda ha estado marcada por encuentros con responsables del gobierno y representantes de la industria tecnológica.
El desbloqueo de las ventas del chip H20 ha sido interpretado como un gesto de distensión en la tensa relación bilateral. El acuerdo ha coincidido con la relajación de controles por parte de ambas potencias, como la reanudación de los visados estudiantiles, el levantamiento parcial del bloqueo a software de diseño de microchips o el restablecimiento de las exportaciones de tierras raras.
Pese a ello, el proceso sigue siendo vigilado de cerca por legisladores estadounidenses, algunos de los cuales han planteado dudas sobre la conveniencia de entregar tecnologÃa crÃtica a empresas chinas. Desde el ejecutivo de Biden y la administración Trump se ha insistido en la importancia de mantener la superioridad tecnológica, evitar transferencias indebidas y proteger los intereses estratégicos de EE UU frente a avances chinos en IA.
Por su parte, el gobierno chino considera esencial evitar la politización de la tecnologÃa y defiende la normalización de los lazos comerciales. Varios portavoces han subrayado que la innovación y el desarrollo cientÃfico no deben ser utilizados como herramientas de presión económica ni de competencia desleal.
Reacciones en los mercados y perspectivas de futuro
El anuncio de la vuelta al mercado chino se ha dejado notar de inmediato en Wall Street, donde las acciones de Nvidia han repuntado más de un 5%, impulsando la capitalización de la compañÃa hasta nuevos máximos históricos. Este movimiento confirma el peso de la inteligencia artificial en las estrategias de los grandes inversores y en la valoración de las tecnológicas.
En paralelo, los grandes clientes chinos del sector tecnológico, como ByteDance, Tencent o Alibaba, han mostrado interés en presentar sus solicitudes para acceder a los chips H20. Aunque algunas fuentes han desmentido la inmediatez de las compras, hay consenso en que la apertura de la «lista aprobada» de Nvidia supondrá una reactivación intensa de la demanda local.
A nivel internacional, la decisión estadounidense también ha sido objeto de debate polÃtico. Algunos representantes del Congreso han criticado el cambio de postura y reclaman mayor transparencia sobre los lÃmites en el suministro de tecnologÃa avanzada a China, aludiendo a preocupaciones estratégicas y de seguridad nacional.
Por último, expertos de la consultora Beacon Global Strategies advierten que la relevancia real del movimiento dependerá del número de chips finalmente autorizados para exportación. Si China logra hacerse con un volumen crÃtico de H20, la brecha tecnológica entre ambos paÃses podrÃa acortarse, reavivando la carrera global por el liderazgo en inteligencia artificial.
