No sabemos si el año 2023 estará también repleto de lanzamientos de videojuegos totalmente inacabados y repletos de bugs. Tampoco sabemos si de aquí al año que viene se sabrá algo más del desaparecido Silent Hills. O si Nintendo decidirá retomar de una vez Golden Sun. Pero lo que sí parece estar claro es que se viene un 2023 sin FIFA y también sin Call of Duty. ¿Acabarán AlphaSniper y Dj Mario jugando al Animal Crossing el año que viene?
Call of Duty se toma un año sabático
El primer Call of Duty salió en el año 2003 en PC. Tuvo muy buenas críticas, y desde ese año, Activision no ha parado de sacar billetes con la franquicia. Durante 20 años, Call of Duty ha cumplido con un título anual con la precisión de un reloj suizo.
Sin embargo, ese ritmo tan predecible que nos ha acompañado durante estos años se tomará un respiro tras el lanzamiento de Call of Duty 2022: Modern Warfare 2, que se espera que llegue a finales de este año.
Rompiendo un poco con la rutina, el estudio ha anunciado que la entrega de 2023 de Call of Duty se retrasará al año 2024. Según ha recogido Bloomberg, esta decisión se debería a que Call of Duty: Vanguard ha tenido una calidad percibida por debajo de lo esperado.
La decisión llega en un momento de debate. Durante estas últimas semanas, la compra repentina y poco esperada de Activision por parte de Microsoft ha puesto el grito en el cielo. No son pocos los jugadores que han especulado que Call of Duty podría desaparecer de PlayStation, siendo esto una jugada sucia y monopolista por parte de los de Redmond. Aunque, de momento, Activision ha calmado a las masas afirmando que no hay planes de abandonar la plataforma de Sony —por lo menos, hasta que todos los organismos antimonopolio de Estados Unidos den por buena la adquisición de Microsoft—.
Electronic Arts también podría renunciar a FIFA en 2023
Es un secreto a voces desde octubre de 2021. La FIFA ha subido notablemente el precio de sus licencias a Electronic Arts, y los americanos no parecen estar muy alegres con la idea. Si todo sigue este camino, FIFA 22 será el último FIFA de una larga estirpe de títulos.
La FIFA (el organismo internacional) dice que quiere abrir su licencia a más compañías, poniendo fin así a la exclusividad de EA. Electronic Arts, por su parte, cree que su juego es más grande que la propia FIFA. De este modo, el estudio sigue barajando la posibilidad de no pasar por el aro de la federación y seguir produciendo su juego, pero sin utilizar la marca ‘FIFA’. ¿Se convertirá el juego en una especie de PES con jugadores y clubes falsos? No necesariamente. EA tiene y ha renovado la licencia FIFPro, que es la que le permite utilizar a los jugadores en su videojuego. Si esto ocurriese, lo más probable es que el título pasara a llamarse FUT23, pues la marca FUT (FIFA Ultimate Team) es un activo que EA lleva trabajando desde hace más que una década. Y, aunque integre la marca ‘FIFA’ dentro de sus siglas, siempre pueden justificar que significa ‘Football Ultimate Team’ o cualquier excusa similar para quitarse el muerto de encima.