Una consola portátil con energía infinita con la que no poder para de jugar? Eso es lo que se propusieron en la Universidad Northwester y la Universidad Tecnológica de Delft en Holanda. ¿El resultado? Una especie de Game Boy alimentada con energía solar que es capaz de funcionar permanentemente sin otra fuente de energía más.
La Game Boy solar
Según uno de los codirectores del proyecto, Josiah Hester, se trata del primer dispositivo interactivo sin batería que recolecta energía de las acciones del usuario., y es que con sólo pulsar uno de los botones estamos generando energía para hacer funcionar la máquina. Es una idea de un dispositivo de juego completamente sostenible que podría sentar las bases de un futuro bastante esperanzador.
Y sí, la tecnología que ofrece es bastante rudimentaria, pero por algo hay que empezar. La hazaña es tremendamente importante, ya que, al deshacerse de la batería al completo, este tipo de dispositivos servirían crear sistemas de juegos sostenibles que van a poder seguir divirtiendo a los usuarios.
¿Cómo se genera energía?
La principal fuente es la solar, ya que los paneles solares que están instalados en la parte frontal se encargan de suministrar energía al dispositivo. Pero, además, existirá otra fuente de energía más, y no será otra que la del propio usuario, ya que pulsando los botones generará energía extra. El sistema recibe el nombre de ENGAGE, y lo interesante es que han conseguido adaptar el sistema de Game Boy para que se pueda utilizar los cartuchos originales de la consola.
Todavía no es perfecta
Para que todo funcionara a la perfección, sus creadores tuvieron que diseñar el hardware y el software para que el dispositivo fuera extremadamente eficiente. Su principal novedad frente a la Game Boy original es la pantalla, ya que se trata de un panel LCD bastante pequeño que consumirá muy poca energía cuando esté encendido.
Lo interesante es que, si la consola se queda sin energía, una memoria no volátil guardará la información en ese preciso instante, y en el momento que volvamos a tener energía suficiente para que la consola vuelva a la vida, el juego continuará justo por ese mismo instante donde lo dejaste. Sin importar si estabas en medio de un salto o una conversación.
Y es que claro, en días nublados o cuando las condiciones de luz no son óptimas, la vida de esta peculiar consola tiene los días contados. Para que te hagas una idea, cuando las condiciones de luz son favorables, la consola funciona durante 10 segundos, y descansa durante 1 segundo. Eso siempre y cuando sean juegos que no requieran demasiadas pulsaciones, ya que, si se tratan de juegos de acción en los que hay que pulsar continuamente los botones, la consola se viene abajo. Y algo importante que deberías de saber, los juegos funcionan sin sonido por cuestiones de energía más que evidentes.
Todavía queda mucho por recorrer, pero no hay duda de que el futuro de este tipo de dispositivos es prometedor, ya que permitiría ofrecer una opción completamente sostenible para el medio ambiente. La pregunta es, ¿cuántas granjas solares hacen falta para hacer funcionar una PlayStation 5?