A principios de año se presentó el Intel NUC 9 Extreme, un PC con alma gaming y un tamaño muy compacto. No llegaba a lo que la familia NUC había demostrado en otras ocasiones anteriores, pero sí era lo suficientemente pequeño como para llamar la atención frente a un PC para juegos tradicional. Pues ahora, tras las pruebas con el equipo ya puesto a la venta queda claro: es la mejor opción para jugar en el salón.
Potencia en formato compacto
Cuando uno piensa en un PC para juegos, especialmente si se busca potencia, lo normal es hacerlo en equipos con un tamaño importante. Porque hace falta espacio suficiente para incluir sistemas de disipación que puedan mantener controladas las altas temperaturas cuando funciona a máximo rendimiento.
El gran problema es que, una torre de ese tipo no encaja bien en el salón. Se puede colocar, sí, pero estéticamente no es atractivo, aunque siempre habrá a quien no le importe. Por lo que, una opción podría ser recurrir a una instalación que permita tenerlo en otra habitación. Pero si lo que buscas es algo que puedas colocar junto al televisor sin molestar, además de las opciones habituales que son las consolas, este Intel NUC 9 Ghost Edition podría ser la opción que andabas buscando.
Desde que se presentó a principios de año llamó la atención de muchos entusiastas por este tamaño tan compacto y por su potencia. Pero ahora, que ya se ha podido probar, el interés crece porque resulta potente y eficiente. Aunque el precio que hay que pagar por él lo aleja.
Pero antes de hablar de potencia, físicamente es como puedes ver, un equipo que no resulta mucho más grande que consolas como la Xbox One o la PS4 Pro. Es algo más alto, pero puedes encajarlo perfectamente en cualquier lugar de casa, ya sea en horizontal como vertical. Esa altura o anchura, según se mire, se debe a cómo van integrados sus distintos componentes.
Y ahora sí, hablemos de su hardware. Estos equipos se pueden configurar con distintos procesadores de Intel, desde el Intel Core i5 hasta el Intel Core i9, un procesador que con sus 8 núcleos es capaz de ofrecer potencia de sobra para multitud de tareas. Eso más una buena cantidad de memoria RAM, unidades SSD y esa configuración gráfica tan potente hace que se posicione como el gran PC para juegos del salón.
Pero si te preguntas cómo rinde, sólo hay que ver las pruebas de algunos canales especializados en hardware. Está claro que resulta un equipo muy atractivo por tamaño, pero sobre todo por potencia. Puedes ejecutar todo tipo de juegos y obtener una experiencia de gran nivel. Y eso, ahora que llegan títulos como Cyberpunk o la remasterización de Crysis resulta llamativo si quieres disfrutarlas a tope. Aunque, como suele ser habitual, no es perfecto.
Lo mejor y lo peor
¿Cómo se consigue tanta potencia en tan poco espacio? Pues con lo que ellos llamaron como Compute Element, una solución que permite integrar en una placa propia todos los componentes principales a excepción de la GPU dedicada. Ese diseño optimiza el espacio y se conecta a una placa principal que a su vez conecta la GPU. Un esquema que resulta interesante, porque podría sustituirse fácilmente en un futuro para mejorar las prestaciones. Claro que, si optas por la configuración más potente poco más vas a necesitar.
No obstante, todo esto que resulta tan llamativo y atractivo tiene un punto negativo importante: el precio. Sin duda es lo peor de esta propuesta, el coste que tiene el equipo con respecto a una solución similar donde el tamaño no es un extra que también se paga. Para que te hagas una idea, la configuración con un Intel Core i9 comienza en unos 1.500 euros. Así que, en el momento que sumes memoria, almacenamiento y gráfica puedes irte fácilmente a los 3.000 euros.
Si lo comparas con el Mac Pro de Apple es mucho más económico. Aunque lo lógico es hacerlo con propuestas PC Gaming. En esos casos, hay detalles que afectan, pero si buscas un PC pequeño y ni la futura PS5 o Xbox Series te convencen, ya sabes por qué equipo deberías apostar si vas a usarlo en el salón de casa.