Cuando Microsoft presentó su Xbox Series X, dejó claro que era la consola más potente del mercado. Su peculiar configuración le permitía tener una mayor potencia gráfica a nivel de números que PS5, sin embargo, con el lanzamiento de la nueva PS5 Pro, todo esto va a cambiar rápidamente. Pero, ¿cuánto exactamente?
Diferencias de CPU
El componente principal de las consolas no es precisamente el que determina el ganador. Ambas propuestas se basan en la misma plataforma, el AMD Zen 2 de ocho núcleos, aunque dependiento de la consola una es capaz de trabajar a una velocidad superior a otra. Xbox Series X alcanza una frecuencia máxima de 3,8 GHz, mientras que PS5 Pro, al igual que PS5, se queda en los 3,5 GHz. Esto indica que Xbox Series X es ligeramente superior (incluso cuando trabaja en multihilo a los 3,6 GHz limitados), pero no es algo que sea especialmente diferencial.
GPU: Lo verdaderamente importante
La clave está, obviamente, en la GPU. El diseño customizado de Xbox presenta una RDNA 2 de AMD con 52 unidades de computación corriendo a 1,82 GHz, lo que se traduce en una potencia de procesamiento de 12,15 teraflops. Esta es la famosa cifra que hacía ganadora a Xbox en el papel, ya que PS5 se quedó en los 10,28 teraflops con sus 36 unidades de computación a 2,23 GHz.
Ahora bien, según lo compartido por Sony, PS5 Pro cuenta con un 67% más de unidades de computación, lo que se podría traducir en unas 60 CUs aproximadamente que podrían dar algo más de 17 TFLOPS. Aun así, estos cálculos son meras especulaciones, ya que Sony no ha entrado en tantos detalles por el momento.
De todas formas, visto lo visto, parece claro que PS5 Pro será más potente que Xbox Series X a nivel de GPU, algo más que esperado teniendo en cuenta el rendimiento prometido.
Resto de diferencias
Algo muy criticado sobre PS5 Pro es la ausencia del lector de discos Blu-ray. Este componente deberá de adquirirse por separado, por lo que el precio final de la consola sube todavía más. En Xbox Series X esto no ocurre, ya que precisamente el diseño de la consola incluye el lector desde la primera versión que llegó al mercado.
En cuando al almacenamiento, ambas consolas tienen versión de 2 TB (por defecto en PS5 Pro y modelo superior en Xbox Series X), aunque hay un detalle interesante a destacar en PS5 Pro, y es que la memoria RAM incluida es un 28% más rápida que la versión de PS5 normal, algo de lo que deberíamos de encontrar más detalles en los próximos meses.
Por último, mencionar también que PS5 Pro incluye una ranura para discos SSD, mientras que Xbox Series X apuesta por el formato propietario de los módulos de expansión (del tipo Compact Flash Express Tipo B).
¿Qué consola es mejor?
Es cierto que a nivel de especificaciones podríamos no encontrar demasiadas diferencias, pero son esos pequeños cambios introducidos en PS5 Pro los que permiten obtener un rendimiento superior. Según Sony, la idea es ofrecer 4K sin límites y sin necesidad de obligar al usuario a elegir entre diferentes modos de rendimiento, de manera que la experiencia sea la mejor en todo momento. Cosa que Xbox Series X no alcanza.
El problema está en que en la práctica no parece que todos los juegos vayan a llegar al 4K nativo, ya que se usarán técnicas de escalado con inteligencia artificial con el nuevo PlayStation Super Spectral Resolution para lograr una gran definición sin asfixiar a la GPU. Por esa razón, a estas alturas la compra podría no estar justificada para algunos usuarios, por lo que deberemos de esperar más detalles para conocer el rendimiento y las especificaciones al completo de la nueva consola.