¿En qué tareas nos puede ayudar la domótica? Pues, desde encender las luces automáticamente cuando llegas a casa, limpiar tu casa o, incluso, avisarte si alguien ha entrado a casa cuando no estabas y puede mostrarte una imagen de esa persona en tu propio teléfono. Si todo esto te interesa y quieres saber hasta qué punto la domótica puede facilitarte la vida, sigue leyendo porque voy a contarte todo lo que necesitas saber.
El término domótica es algo que ya está bastante extendido pero, si andas algo despistado con este tema, te explico lo que significa: en el diccionario se define como “un conjunto de técnicas orientadas a automatizar una vivienda”. O explicado de una manera más sencilla: es el conjunto de equipos tecnológicos que puedes incluir en tu casa para que, de forma automática o con ciertas acciones, te ayuden a hacer las tareas de tu día a día.
¿Qué es una casa domótica?
Una vivienda domótica es un lugar que implementa una serie de beneficios para sus habitantes. Un hogar en el que es más cómodo vivir porque, ciertas tareas pesadas, se hacen de forma automática y sin que debas preocuparte demasiado por ellas. Un lugar más confortable y seguro, ya que podemos colocar sensores, cámaras de vigilancia o alarmas que, si detectan cualquier anomalía, te avisen a ti o, incluso, a las fuerzas de seguridad de que algo está pasando en tu casa.
Un lugar más ahorrador en el que, gracias a otra cantidad de sensores, conectores o bombillas, no se está malgastando ni una pizca de tu dinero con luces no deseadas que se mantienen encendidas, ventanas abiertas que gastan la energía de la calefacción o agua desaprovechada en el riego de las plantas.
O, por qué no, un lugar en el que es más “fácil” vivir con detalles que van desde tener un asistente que te ayude a preparar una comida, un frigorífico que te indique que te estás quedando sin algún alimento o, simplemente una televisión que puedes controlar mediante comandos de voz si no quieres levantarte del sofá e ir en busca del mando a distancia.
Y si quieres ver algunos ejemplos más de una casa domótica, te dejo un vídeo de nuestro canal de Youtube, en el que te cuento cómo el asistente virtual de Amazon y unos cuentos equipos domóticos que tengo en casa me hacen la vida más fácil.
Por qué deberías tener una casa domótica. Motivos a favor
Pero claro, como cualquier otra cosa, el tener una casa “domotizada” tiene sus ventajas y desventajas. En primer lugar, aunque ya te he hablado de alguna de ellas, voy a contarte cuáles son los puntos positivos:
Comodidad
El hecho de que ciertas tareas se realicen de forma automática y que, además, podamos tener control de toda la domótica a través de nuestro propio smartphone, hace que podamos estar más tranquilos y cómodos o, incluso, tengamos más tiempo para nosotros mismos.
¿Has pensado alguna vez en cuánto tiempo empleas cada día en encender y apagar luces? ¿O en buscar el mando de la tele? Son minutos, pero a lo largo del día, pueden dar para mucho. No tener que levantarte para encender una luz o cambiar de canal simplemente dando una orden te pueden ahorrar bastante tiempo cada semana. Además, también tienes la ventaja de poder controlar ciertas áreas de tu casa cuando no estás en ella.
Ahorro económico
Que las luces de nuestra casa se enciendan sólo cuando sea necesario, que tengamos alertas de ventanas abiertas para optimizar el uso de la calefacción o, incluso, el control de cada enchufe de nuestra casa, son detalles que suman. Si conseguimos optimizar cada uno de ellos y reducirlos al máximo, se traducirá en un menor consumo energético que, por ende, se convierte en un menor desembolso económico a final de mes. Además, podremos hacer todo esto desde cualquier lugar con conexión a internet, lo cual suma un punto extra de facilidad.
Tendemos a pensar que tener más y más aparatos inteligentes enchufados va a suponer un aumento de nuestra factura, pero puede llegar a ocurrir todo lo contrario. La mayoría de dispositivos inteligentes consumen muy poca energía, y es su apagado y encendido remoto lo que nos va a permitir usarlos únicamente cuando los necesitamos. Además, dispositivos como los enchufes inteligentes permiten incluso consultar la corriente que están consumiendo nuestros electrodomésticos.
Seguridad
A todos nos gusta irnos de vacaciones tranquilos y no estar preguntándonos si todo sigue en orden en nuestra casa. La implementación de equipos como videoporteros, cámaras, sensores o alarmas se traducen en una mayor seguridad de nuestro hogar y, en consecuencia, en una mayor comodidad como te comentaba en la primera ventaja.
Añadir cámaras al ecosistema de Alexa o Google Home es extremadamente sencillo y muy barato. No vas a necesitar contratar a una compañía ni tener conocimientos avanzados de instalaciones. Además, las cámaras para videovigilancia se han vuelto muy asequibles, por lo que hacerse con una ya es una compra casi obligada si tienes ya un despliegue domótico considerable, ya sea para vigilar tu casa o para echar un ojo a tus mascotas cuando estás fuera.
Motivos en contra de la domotización
Y, ¿cuáles son los puntos negativos de una casa domótica? Pues también existen varios:
Dependencia de la conexión
Todo es muy bonito en un “hogar inteligente” hasta que la conexión a la señal WiFi falla. Existen equipos que podremos seguir usando, por el método de conexión que tienen con nuestro teléfono, a pesar de que la conexión falle. Pero, muchos otros se quedarán inutilizados o, dependiendo del equipo, tendremos que usarlos de forma manual “a la viaja usanza”.
Mayor desembolso
Es cierto que este tipo de equipos nos permiten ahorrar dinero debido a su optimización pero, como sucedió con el cambio de bombillas incandescentes a las bombillas LED, el desembolso inicial que debemos hacer (comparado con la compra de un equipo “normal”) es mayor. Si sumamos todo esto a la compra de varios altavoces inteligentes, la factura puede ser considerable. Nuestra recomendación es que vayas ampliando tu casa inteligente poco a poco para no hacer un agujero en tu cuenta corriente. Empieza con un altavoz y un par de bombillas, ve acostumbrándote y poco a poco, hazte con más dispositivos.
Vulnerabilidad
Aunque estos equipos aumentan la seguridad de nuestras casas, también hay que pensar que están conectados a internet y, como cualquier equipo conectado, son “vulnerables” a ser hackeados por algún indeseable. No es algo muy habitual (que no cunda el pánico), pero es un detalle a tener en cuenta. Además, si incluyes equipos como asistentes inteligentes, se dice que este tipo de dispositivos nos “escuchan” a través de sus micrófonos para luego vender cierta información a ciertas empresas que les desean conocer nuestros intereses.
Llegó la hora de “domotizar”, ¿por qué empiezo?
Una vez vistos todos estos puntos, lo que significa “domotizar” una casa y sus ventajas e inconvenientes, es hora de que tomes una decisión y pienses si disfrutar de los beneficios de un hogar inteligente te merece la pena, o no, teniendo en cuenta los contras que esto implica.
Luces, enchufes…
Seguramente te estés preguntando por qué equipo deberías comenzar a la hora de llevar equipos inteligentes a tu hogar. Y lo cierto es que te recomiendo que el primer paso sea por donde la mayoría hemos comenzado: una bombilla o un enchufe inteligente. Estos son los elementos más básicos y los que, gastando relativamente poco, podrás darte cuenta si esto de la domótica es para ti. Si empiezas por los equipos de Ikea, por ejemplo, no vas a necesitar un equipo Echo o Nest, pues pueden funcionar de forma independiente.
Altavoces inteligentes
Por otro lado, es muy interesante incluir un altavoz inteligente a tu hogar. Ya sea de Google o Amazon, la llegada de este significará ciertas ventajas a nivel de funcionalidades que ya te hemos comentado en otros artículos de esta web. Si te esperas al momento adecuado, podrás encontrar alguna oferta interesante (sobre todo en Amazon) para incorporarlo a tu hogar. El HomePod de Apple también puede ser una opción interesante, aunque te adelantamos que por el momento, su ecosistema no es tan amplio como el de su competencia.
Si te sirve de ayuda, yo soy un pro-domótica y tengo varios artículos en mi casa que me facilitan ciertas tareas y que, si mañana mismo me los quitaran, podría vivir sin ellos pero los echaría de menos. Pero aquí que cada uno juzgue si la domótica es para él.