Así nació la primera consola de cartuchos intercambiables

La Fairchild Channel F fue uno de los sistemas de ocio electrónico más importantes dentro de la historia de los vídeojuegos. Uno que cambió las formas y podría decirse que dio paso a la segunda generación de consolas. Sin embargo, aún a día de hoy sigue siendo una desconocida. Tanto como su responsable.

Fairchild Channel F, la consola desconocida

A principios de los años 70 el concepto de ocio electrónico dentro del hogar empezaba a ganar fuerza. Gracias a la llegada de propuestas de fabricantes como Atari, Magnavox, Coleco, Nintendo, Sega, etc. el mundo de los videojuegos se expandía y empezaba a ser algo accesible para todos desde sus propias casas y no sólo en salones recreativos.

Sin embargo, entre todos esos momentos de revolución hubo uno que de forma injusta se omite en numerosas ocasiones: la creación de la Fairchild Channel F, una consola que cambió la historia de los vídeojuegos y pocos saben el por qué ni quién fue responsable de que eso ocurriese.

La Channel F o Fairchild Channel F, como realmente se llamaba, era un sistema de entretenimiento en vídeo que se lanzó en noviembre de 1976. El precio en aquel momento fue de 170 dólares, que con la inflación no tiene nada que ver con los actuales 170 dólares que te costaría algo ahora mismo. Pero dejando a un lado ese aspecto, su precio no fue lo que realmente llamó la atención y dio paso a lo que se conoce como la segunda generación de consolas.

Este era el mando de control de la Channel F

Con unas 250.000 unidades vendidas, el mayor éxito de la Channel F no fue otro que permitir un producto para el cual se podía programar, que era potente y que, además, permitía el uso de cartuchos intercambiables. Estos en aquella época se conocían como Videocart y el precio de cada uno de ellos rondaba los 20 dólares.

Estos cartuchos fueron realmente el gran éxito e incluso innovación de un sistema que rompía lo que hasta el momento se había estado haciendo. Porque permitía tener un catálogo de juegos en continua expansión. Algo interesante pues no te limitaba a un lista de títulos fijos y daba la libertad de pagar por el que realmente te gustaba o estabas interesado jugar.

Exacto, gracias a esa posibilidad de adquirir nuevos cartuchos y a características técnicas como su microprocesador Fairchild F8 a 2 Mhz y 64 bytes de RAM, hicieron que otras marcas empezasen a fijarse con más detalle en el trabajo realizado. Y una de ellas fue Atari.

Atari necesitaba dar un paso hacia adelante, porque empezaba a ver cómo el mercado se atascaba, como los usuarios se aburrían de tener siempre los mismos juegos. Así que cuando vio la Channel F lo tuvo claro, harían algo similar. De ahí nació la Atari Video Computer System, una consola que ya no necesita presentación y todo aficionado al mundo de los videojuegos que disfrute con lo retro la conoce.

Jerry Lawson, el creador de Channel F

Jerry Lawson es el desconocido creador de Channel F, aunque no está de mas retroceder un poco en el tiempo para conocer cómo llegó a encontrarse con aquel prototipo que luego acabaría convirtiéndose en esta particular consola.

Fue dos años antes de su lanzamiento, en 1974 cuando dos empleados de Alpex Computer Corporation, Wallace Kirschner y Lawrence Haskel, estaban trabajando en un prototipo de sistema de juegos para el hogar que se apoyaba en un procesador Intel 8080 más un conjunto de placas intercambiables donde el código de los videojuegos se almacenaban en una memoria ROM.

Estos tenían claro cómo querían hacerlo, pero les faltaba apoyo. Así fue como contactaron con la empresa Fairchild para ver si estarían interesados, les compraban el producto y acababan de darle forma. Pues bien, Jerry Lawson era ingeniero y trabajaba para Fairchild. Así que fue a él a quien le encargaron la tarea de revisar el producto y ver si aquel prototipo tenía una base sólida para convertirse en algo comercial.

Lawson quedó francamente sorprendido cuando vio el sistema, así que no se lo pensó, dio su aprobación a la compra y se encargó de dirigir el equipo de Fairchild que acabaría creando la Channel F. De modo que eso le llevó a ser considerado como el inventor de los cartuchos de juegos.

Los fallos de los inicios

¿Por qué la Channel F no aparece más cuando se habla de la historia de los videojuegos, de consolas retro, etc.? Pues la pregunta tiene una respuesta más o menos sencilla: le pudieron sus fallos de gestión iniciales. Y no nos referimos al producto, sino a la gestión como las patentes de los juegos publicados.

Channel F tuvo un total de 27 cartuchos o videocarts, pero los primeros títulos no se patentaron y eso permitió que se crearan numerosos clones. Al aparecer propuestas mas económicas que ofrecían juegos casi idénticos a excepción de los nombres y algún detalle menor provocaron que las posibilidades de Channel F quedaran un poco en segundo plano.

Así pasó el tiempo y la que podría haber sido una gran consola, quedó relegada a un papel secundaron dentro de la historia. Por mucho que fuese la precursora de la segunda generación de máquinas de la historia. Incluso la segunda versión no logró remontar el vuelo.

De todos modos, la consola sigue siendo uno de esos tesoros que muchos fans siguen buscando hoy en día a través de subastas, páginas webs de segunda mano, etc. Por lo que, como podrás imaginar, si por algún casual te encuentras con una de estas consolas en casa de algún familiar, amigo o tienda y puedes hacerte con ella, hazlo.

Una vez la tengas, primero pruébala y experimenta esa propuesta de ocio. En segundo lugar, si no eres un coleccionista empedernido de todo esto, puede que tengas la posibilidad de haber un buen negocio y venderla a quien esté interesado en una reliquia retro.


Síguenos en Google News

Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Actualidad Blog
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.