Samsung parece que dará un nuevo empujón a su familia Galaxy S10 y Galaxy Note 10 antes de lanzar sus sucesores, en particular el nuevo Galaxy S11 que verá la luz en dos meses aprovechando que llega el MWC. La marca podría tener ya listos nuevos modelos Lite.
Prepárate para un nuevo Galaxy S10 Lite y Note 10 Lite
Con un mercado saturado y con las gamas medias de marcas como Xiaomi o Realme entre otras apretando tanto, es lógico que fabricantes como Samsung estén buscando la forma de revitalizar las ventas de sus dispositivos. Para lograrlo, en esta ocasión y tal y como se viene rumoreando durante algunas semanas, la marca lanzaría versiones Lite de sus dos teléfonos insignia.
Un Samsung Galaxy S10 Lite y Galaxy Note 10 Lite podrían dejarse ver en breve para aprovechar las ventas del mes de diciembre. Estos dispositivos mantendrían las líneas de diseño del modelo original, pero cambiarían en un aspecto clave en cuanto al rendimiento que ofrecería: el procesador.
Según test de rendimiento en Geekbench 5, el modelo SM-N770F que correspondería al Samsung Galaxy Note 10 Lite obtendría una puntuación de 667 puntos en el test single core y 2030 en Multi core. Aunque no son estos resultados lo llamativo sino más bien la elección de procesador por parte del fabricante.
Para poder ajustar el precio Samsung habría elegido un procesador con un año ya en el mercado. Es decir, la misma CPU que la compañía utilizó en 2018 con su anterior serie: el Exynos 9810. Estos procesadores del Note 9 y S0 siguen siendo muy capaces y mejor elección que cualquier Snapdragon destinado a la gama media actual.
Junto a esta CPU llegaría un ajuste en memoria RAM que se situaría en 6 GB. Con dicha cantidad el sistema, aplicaciones y juegos se desenvolverían igualmente bien y permitirían al fabricante ajustar más el precio.
Nuevos Galaxy S10 Lite y Note 10 Lite, ¿mismo diseño?
Con el dato técnico del procesador sobre la mesa, a muchos usuarios realmente lo que le interesa saber es qué pasará con el resto de especificaciones y si el diseño se mantendrá. Pues bien, información acerca de estos terminales no hay mucha. Por lo que en parte mucho de lo que se comenta son todo puras especulaciones.
Es lógico pensar que el diseño mantendrá mucha semejanza, pero también es más que probable que haya ligeros cambios. Por ejemplo, un cuerpo algo más redondeado y menos ángulos como ocurre con el Note 10.
También es lógico que si recortan en CPU algún cambio similar ocurra con otro de dos apartados claves de un teléfono: sus cámaras y la pantalla. No van a llegar con los mismos paneles y sus mismas resoluciones. Y en cámaras ocurriría algo similar. Cuando se trata de una gama Lite la idea es ofrecer la misma esencia, pero recortar en aquellos detalles que hacen subir el precio.
No obstante, sin conocer exactamente cuál es la estrategia de Samsung para tal movimiento, lo cierto es que no parece ninguna locura. Marcas como Huawei le han comido parte del pastel, Xiaomi y reciamente Realme también aprietan mucho. Y todo esto sin olvidar el buen trabajo de Oppo, OnePlus, etc.
Estaremos atentos para ver si en los próximos días se produce la presentación conjunta de ambos terminales.