Para mejorar tu trabajo creativo, ya sea diseñando, editando fotografías o vídeos, es importante contar con un monitor que ofrezca un buen rendimiento a la hora de mostrar las imágenes de la forma más correcta posible. Por eso, hemos seleccionado los que podrían ser los mejores monitores para tareas de edición de imagen.
Monitores para edición profesional
Las claves de un buen monitor para edición de foto y vídeo, también para otras tareas creativas como el diseño vectorial o web, ya las conocerás. Son prestaciones que comparado con otros usos como los videojuegos pueden variar. Porque aspectos como un refresco de pantalla rápido aquí no son tan necesarios en este sector. Sin embargo, la fidelidad de color, ángulos de visión, contraste y brillo son aspectos más importantes.
Equivocarse en uno de estos detalles puede significar que el resultado final de nuestro trabajo no tendrá la calidad deseada que espera el cliente. Algo crucial en el sector más profesional. Por este motivo es necesario que sepas elegir bien a la hora de comprar uno de estos monitores para edición de fotografía, vídeo o cualquier trabajo de alto nivel.
Los mejores monitores para editar fotos y vídeos
Así que, buscando los que mejor rinden en estos aspectos, hemos seleccionado los monitores más atractivos por precio y prestaciones para tareas de vídeo y foto. Si buscas una nueva pantalla para mejorar tus trabajos y no sabías cuál elegir, aquí seguro que encuentras unas buenas recomendaciones.
LG 27UL500
LG es uno de los fabricantes con mejores pantallas para temas creativos a un precio asumible por la mayoría de usuarios y profesionales. Según el modelo y aspectos como las conexiones disponibles su precio variará, pero en genial son muy atractivas en todo su conjunto.
La LG 27UL500 es una de estas propuestas que por apenas 300 euros tienes un panel IPS con resolución 4K UHD y buen rendimiento en calidad de imagen. A nivel de conexiones tenemos dos HDMI, DisplayPort y salida de audio para conectarle unos altavoces externos gracias al sonido que llegaría vía HDMI.
Una opción muy similar en cuanto a diseño, aunque algo más refinado, y con las mismas conexiones es este LG 27UK650. Su precio aumenta, pero es debido a que alcanza niveles de brillo superiores que pueden ser útiles para ciertas situaciones o trabajo con contenidos con algo más de rango dinámico.
Los monitores Ultrawide tienen ventajas notables para ciertos tipos de actividades. La edición de audio y vídeo son unas de ellas, al poder tener más herramientas en pantallas y timelinas más largos con los que trabajar cómodamente.
La pantalla LG 34WK95U es de formato ultra panorámico y mantiene esa calidad de los paneles IPS del fabricante. Su precio es superior a la anterior propuesta, por lo que podría interesarte tener dos pantallas en lugar de una sola. Aún así, ten en cuenta que ofrece un panel de resolución 5K, 5120 x 2160 píxeles. ¿A que ya no resulta tan descabellado sus 1.199 euros?
Las pantallas de BenQ, aunque no tengan mucha popularidad entre los usuarios, llevan un tiempo ofreciendo paneles de muy buena calidad en temas de imagen. La BenQ PD2700Q ofrece un panel de 27″ con resolución QHD que a pesar de no llegar a los 4K en cuanto a fidelidad de color responde muy bien. Con certificación de Technicolor.
Subiendo de escalón en términos de calidad y precio está el BenQ PD2720U, pantalla de 27″ de diagonal y resolución 4K UHD. Esto más conexión Thunderbolt 3 y soporte para espacios de color DCI P3 hacen que sea una opción muy recomendable para perfiles más profesionales. Eso sí, su precio está alrededor de los 900 euros.
Los paneles de Dell siempre han ofrecido un gran rendimiento en actividades profesionales de todo tipo. En temas de edición de fotografía y vídeo tampoco se han quedado atrás, y modelos como este Dell U2518D lo demuestra.
La calidad a la hora de mostrar imágenes de todo tipo con una buena fidelidad de color, brillo y contraste, es una pantalla que junto a una resolución QHD y diagonal de 25″ ofrece una densidad de pixeles atractiva. Además, todo el tema de conexiones HDMI, DisplayPort y el HUB USB hacen que sea muy práctico. El precio de esta pantalla es de 320 euros.
Similar en prestaciones y rendimiento al anterior modelo, lo que diferencia a este modelo del anterior es su diagonal de pantalla y resolución. Aquí vas a disfrutar de una pantalla de 27 pulgadas y una definición 4K.
Todo lo demás es prácticamente idéntico en la Dell U2718Q, como la peana ajustable en altura e inclinación, conexiones y HUB USB integrado. Así que, si quieres más diagonal y resolución, esta es una buena opción que ronda los 600 euros.
Este monitor es muy conocido en el mundillo de la edición de vídeo, aunque te adelantamos que para sacarle todo el jugo, es necesario acompañarlo de un ordenador que dé la talla. Esta pantalla tiene un panel 8K (7.680 por 4.320 píxeles), lo que permite organizar muy bien el espacio de trabajo en programas como Adobe Premiere, Final Cut Pro o DaVinci Resolve. También es muy útil para aquellos fotógrafos que disfrutan viendo los detalles de sus imágenes hasta llegar al 1:1. Este monitor tiene un brillo excelente, cubre el 100% del espectro sRGB, el 98% del Adobe RGB y también el 98% del DCI-P3. Para que funcione correctamente, tendrás que utilizar dos cables DisplayPort, así que tenlo en cuenta antes de pasar por caja.
HP tiene algunas propuestas de monitores orientadas al uso conjunto con sus estaciones de trabajo que son realmente incesantes. La pantalla HP Z27 es una de ellas, con un panel de 27″ 4K y antirreflejos, la calidad en temas de color y nitidez son su gran valor. Eso y las opciones que ofrece su peana a la hora de ajustarse en la posición más cómoda según el usuario. Con un precio de 599 euros es una opción altamente recomendable.
Si quieres apostar alto, una de las mejores opciones del mercado es este BenQ PD3220U. Se trata de un panel IPS de 31,5″ con resolución 4K. Además, posee una cobertura del 95 % de dci-p3, así como del 100 % de los espacios de color srgb y rec.709. Si sueles trabajar con un equipo portátil, este monitor cuenta con puerto Thunderbolt 3 para que sólo tengas que usar un sólo puerto y te olvides de más cables.
La gama ProArt de Asus cuenta con bastantes modelos. No obstante, el más interesante es el modelo de 32 pulgadas y resolución UHD. Cuenta con uno de los mejores paneles IPS del mercado y una precisión de color inmejorable. No son las pantallas más caras que puedes encontrarte, pero sí están en el rango medio en cuanto al precio. La construcción de estos modelos es sólida, y el diseño es bastante sobrio y minimalista. Correcto para un ambiente de trabajo y con una estructura y marcos que permite tanto utilizarlo como un único monitor como usarlo como elemento central de un setup multipantalla.
Este modelo cubre el 100% del espectro sRGB y está calibrado por Calman. Cumple con la norma VESA HDR400, por lo que nos garantiza unos niveles de brillo muy interesantes, especialmente si trabajas en una sala con bastante iluminación. Respecto a la conectividad, tiene entrada USB-C y DisplayPort. Se trata de un modelo muy interesante si te dedicas profesionalmente a la edición de vídeo.
Esta marca suele dar una calidad inmejorable, solo que a un precio no apto para amateurs. Este monitor de 31 pulgadas va destinado al público profesional asentado. Por tanto, si te estás iniciando, es mejor que te quedes con algunas de las propuestas anteriores de las que hemos hablado. Este monitor de EZIO cubre el 99% del espectro Adobe RGB y el 98% del DCI-P3. No es solo una pantalla increíble para trabajar vídeo, sino que lo es también para trabajar cine. Esta pantalla integra su propio calibrador en la parte superior de la pantalla, por lo que no dependerás de productos de terceros para volver a calibrar el panel. El ajuste dura una media hora, aunque puedes usar la pantalla mientras se va calibrando.
Teniendo en cuenta que la oferta de monitores e muy amplia, estas son nuestras recomendaciones. Modelos que hemos podido probar o de los que tenemos referencias fiables acerca de su rendimiento en tareas creativas de fotografía y vídeo. Y recuerda, no es lo mismo un monitor para edición y trabajos creativos que una pantalla para videojuegos. Todos podrás usarlos para ambas cosas, pero la experiencia no será igual.
BenQ SW321C PhotoVue
El BenQ SW321C PhotoVue es una pantalla diseñada para editar vídeo. No solo cuenta con un enorme panel de 32 pulgadas con resolución 4K, sino también con una gama de colores digna de un producto para trabajar imagen. El panel cubre el 100% del espectro sRGB, el 99% del Adobe RGB y el 95% del estándar DCI P3. Esta precisión de color permite ver tu trabajo como se supone que debe verse. Además de sus excelentes espacios de color y su precisión es increíblemente uniforme en toda la pantalla.
Este modelo de BenQ tiene casi todos los puertos que puedas necesitar, lo que te permite conectar varios periféricos distintos, como un lector de tarjetas SD, algo que no solemos ver en muchos monitores. Y, como puedes conectar varias fuentes, el monitor tiene preconfigurados varios modos de imagen. Lo más interesante es que puedes utilizar ese modo imagen mientras trabajas, pues puedes comparar dos configuraciones distintas al mismo tiempo. Esto es especialmente útil para simular espacios de color.
Dentro de su rango, el BenQ SW321C PhotoVue no es un monitor especialmente caro, teniendo en cuenta su enorme hoja de características. Obviamente, no es un periférico perfecto, pero está realmente cerca de la perfección.
Antes de despedirnos, echa un vistazo a la recomendación final que te mostramos para que puedas mantener tu monitor profesional rindiendo como el primer día.
No te olvides de la calibración
Independientemente del presupuesto que tengas para tu monitor, es importante también que tengas en cuenta que si necesitas precisión de color, no te bastará con una buena pantalla. Todo monitor acaba perdiendo su calibrado con el uso. Esto se debe a múltiples factores. Uno de ellos es que el panel se va ‘quemando’ con el uso, y hay que rectificarlo para garantizar que todos los colores se siguen representando de forma correcta.
¿Debe preocuparme el calibrado de mi monitor?
Sí y no. Depende del nivel de profesionalidad del trabajo que estés haciendo y de tus preferencias. Del mismo modo, hay situaciones en las que es más importante que en otras. Si trabajas vídeo profesional, hacerte con un hardware específico para calibrar tu pantalla es casi obligatorio. Del mismo modo, si usas varios monitores, también es recomendable utilizar un dispositivo para equilibrar los colores de ambas pantallas y asegurarnos de que todo funciona bien.
Para fotografía, todavía hay un pase. Si trabajas grandes volúmenes de fotos o vas a hacer impresiones, entonces sí que lo necesitas. Si tienes un trabajo un poco más amateur, no deberías preocuparte demasiado por calibrar tu pantalla, siempre y cuando tengas un monitor de cierta calidad.
¿Qué calibrador me compro?
Hay varios modelos en el mercado. Nosotros te vamos a recomendar el que hemos probado, que es el Calibrite ColorChecker Display, antes conocido como X-Rite i1Display Studio. Es un hardware muy fácil de usar y que no tiene un precio tan descabellado como otras opciones que hay en el mercado. Y, por supuesto, sus resultados son muy buenos. Dentro del mismo modelo puedes explorar sus distintas variantes, por si alguna de ellas se adapta mejor a tu trabajo.
*Nota para el lector: los enlaces publicados forman parte de nuestro programa de afiliados con Amazon. A pesar de esto, nuestra lista de recomendaciones es creada siempre libremente, sin recibir ni atender a ningún tipo de petición por parte de las marcas mencionadas.
