Las pulseras inteligentes se han convertido en herramientas indispensables para muchos usuarios. Capaces de monitorizar el sueño y controlar signos vitales como el ritmo cardíaco, poco a poco el mercado se ha llenado de este tipo de dispositivos con los que poder llevar una vida más saludable. Pero, ¿podremos algún día prescindir de wearables?
El altavoz que escucha a tu corazón
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington han diseñado un altavoz especial capaz de medir el ritmo cardíaco de personas sin necesidad de tener ningún contacto con ellas. El secreto estaría en la emisión de unas ondas que rebotan en la persona y son recibidas por un sensor que, con la ayuda de un algoritmo especialmente diseñado para la ocasión, es capaz de descifrar la frecuencia del latido del corazón.
La idea es que este dispositivo sea capaz de detectar ritmos irregulares de personas afectadas por problemas cardíacos, con la peculiaridad de que estaría integrado en un altavoz que podrías tener colocado en cualquier rincón de casa y cuyas ondas serían completamente inapreciables para las personas.
Según las primeras pruebas, el funcionamiento ofrecido es perfectamente equiparable con el de dispositivos de categoría médica, por lo que estaríamos hablando de un avance bastante importante en la industria. Al contrario que los sistemas de medición actuales, los sensores no son capaces de analizar las clásicas curvas de la actividad eléctrica del corazón, sino que en su lugar detecta las vibraciones que se producen en la piel cuando el corazón late.
Un algoritmo muy eficaz
Según cuentan sus creadores, detectar patrones normales de latidos cardíacos es algo que más o menos se puede conseguir de manera sencilla. Teniendo en cuenta la dificultad del método, el sensor logró detectar patrones de ritmo cardíaco con una exactitud muy cercana a la de las herramientas médicas tradicionales, pero lo sorprendente llegó cuando descubrieron que el algoritmo también era capaz de detectar ritmos irregulares, unos patrones más difíciles de identificar al no disponer de patrones que corroboren las lecturas.
La importancia del ritmo
Lo interesante de este sistema es que se encarga de analizar el ritmo, y no la frecuencia, ya que, por decirlo de alguna manera rápida, no es lo mismo obtener la media de latidos (lo que podría ofrecer una pulsera inteligente) que un análisis del ritmo de los latidos durante un periodo de tiempo. Y es que, aunque obtengas una media de 60 pulsaciones por minuto, en un ritmo irregular el corazón se podría acelerar o desacelerar en determinados momentos, y eso es lo que les interesa ver a los médicos. Es ahí donde entran en juego las arritmias y lo importante que son a la hora de detectarlas a tiempo.
Un prototipo con futuro
Hay que recalcar que por ahora estamos hablando de un simple prototipo, pero viendo los resultados, es muy posible que lo veamos integrado en algún producto comercial muy pronto. Más allá de ofrecer soluciones para los hogares, esta tecnología podría servir también para ofrecer este tipo de servicios en hospitales y centros médicos que requieran rapidez y eficacia en las mediciones, además de que permitirá no tener ningún contacto con el paciente (algo bastante demandado en los tiempos de virus que corren).
Por el momento el sistema funciona de la siguiente manera: el paciente debe de colocarse frente al altavoz, y éste realizará las lecturas oportunas. De todas formas, la idea de sus creadores es la de conseguir dar vida a un modelo que sea capaz de analizar las constantes vitales mientras dormimos, para así diagnosticar posibles afecciones como la apnea del sueño.